

Y yo me quede un ratico con ellos para verlos jugar y me dió la intención de hacerles una foto con mi cell, estas que ven aquí, que para mi tienen un gran valor, ya que nos enseña que debemos apreciar, valorar y cuidar lo que tenemos, sea poco o sea mucho, pero sin olvidar que en las orillas de nuestro país hay gente así como estos niños que merecen algo mejor, un sonreir.
Eso me recordó mis tiempos de niñez, caracterizando una gran similitud con mi infancia en la que al igual que ellos, nunca tuve un juguete con el cual jugar.
Les invito a que por lo menos un día de cualquier año visiten ese hermoso pueblito sureño, pero cuando lo hagan lleven algo consigo que pueda dar una sonrisa a un niño de esos.
Se que no solo en mi pueblo hay niños así, pero si van a otros campos, hagan lo mismo, siempre lleven algo que dejar, algo que usted no use, pero que este en buen estado para que quien lo reciba pueda usarlo con alegría.
Hagamos la diferencia en cualquier lugar que estemos!!!
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