Rachel Beckwith no 

vivió para ver su sueño hecho realidad. El pasado 12 de junio cumplió nueve años, y en lugar de pedir que le compraran regalos para su cumpleaños, pidió que se hiciera una donación económica para que niños en situación de pobreza pudieran tener agua potable.
En julio, la nena murió en un accidente automovilístico. Tras la tragedia, Rachel ha inspirado a miles de personas y hoy día, su meta de 300 dólares ha sido superada con creces. Hasta el momento, a través del sitio 'Rachel's 9th Birthday Wish' se han juntado más de $1,200,000 para apoyar a 'Charity: Water'.
"Descubrí que millones de personas no viven para alcanzar los 5 años. ¿Por qué? Porque no tienen acceso a agua limpia y segura", escribió Rachel en su sitio web cuando anunció cómo celebraría su noveno cumpleaños. Su deseo era juntar dinero para ayudar a que otros pequeñitos que viven en países en desarrollo tuvieran la posibilidad de tener una vida más digna.
Para cuando la fecha de su cumpleaños llegó, la campaña de Rachel había logrado recolectar 220 dólares, pero tras su muerte, sus familiares pensaron que la mejor manera para rendirle un tributo a la vida de esta excepcional niña era continuar con su sueño y difundir su mensaje.
Su historia se esparció por las redes sociales y en radio, y poco a poco comenzaron a llegar más y más donativos. Su página ha sido visitada por más de 60,000 personas y ha recibido más de 30,000 donaciones. Quedan 38 días para seguir donando a su nombre, así que si quieres poner tu granito de arena, haz click aquí.
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