Por Raquel Cruz:
En los tiempos de la “Santa inquisición” fueron muchos los mecanismos de torturas que se emplearon, era común y admitido someter a los “pecadores” a la humillación pública, al castigo brutal a los fines de ejemplarizar, al despojo y exorcismo de los demonios o a la confesión forzosa de los “crímenes cometidos”.
Realmente esto era propio de la época, no era considerado delito, sino simplemente parte de las herramientas empleadas para la investigación y punición del crimen, se trataba de procesos tan brutales que muchos estaban destinados a eliminar a la persona, al falible que ya no hacía nada vivo, que ya estaba perdido. (Leer completo)
Realmente esto era propio de la época, no era considerado delito, sino simplemente parte de las herramientas empleadas para la investigación y punición del crimen, se trataba de procesos tan brutales que muchos estaban destinados a eliminar a la persona, al falible que ya no hacía nada vivo, que ya estaba perdido. (Leer completo)